¿Quién no ha tenido una cocina de juguete? Sin duda, hablamos de uno de los juguetes más completos que existen. Pero desde hace unos años pueden disponer de una cocina evolutiva, ¡un gran avance! ¿Quieres saber por qué? ¡Acompáñanos, cocinillas!
No te conformes: apuesta por una cocina evolutiva
- Se adaptan a su tamaño
Una cocina evolutiva puede aumentar su altura varios centímetros. Así, los peques pueden jugar con ella cuando son bajitos, ¡y seguir usándola cuando ya han crecido unos años después!
- Duran varios años
En consonancia con el anterior punto, hablamos de una inversión de futuro. No hablamos del típico juguete que un año más tarde ya no le va a servir. ¡Al contrario! Se trata de una cocina que les acompañará durante gran parte de su infancia. ¿A qué sale rentable?
- Al ser un juego de imitación, les prepara para la vida.
Siempre se dice que la mejor forma de aprender a hacer algo es imitar y repetir una y otra vez. Por eso, una cocina de juguete les puede ayudar a interesarse por el mundo que les rodea. Y una vez se despierta ese interés, ¡es cuestión de tiempo que quieran hacerlo de verdad! No decimos que terminen en Masterchef, pero oye, siempre enorgullece que los peques se conviertan en cocinillas.
- Estimula su imaginación y creatividad
Aunque nuestras cocinas incluyen un montón de funciones molonas y de accesorios realistas, siempre se necesita esa chispa de imaginación para que el juego sea posible. ¿Qué sería de los más peques sin soñar aventuras, aunque sea entre fogones?
- Fomenta el trabajo en equipo
Si juegan varios peques con la cocina, tendrán que hacer un equipo para repartirse las tareas. ¡Así es cómo se aprende a trabajar en grupos! Una cualidad muy necesaria hoy en día, sin duda. Y una cocina evolutiva contribuye a ello.
En Smoby, somos expertos en juguetes duraderos y de calidad. ¡Porque ellos se merecen lo mejor! Por eso, somos esa opción fiable que les puede acompañar toda la vida. ¿Quieres más información? ¡Visita nuestro blog!
